A La Ira de los Mansos
Algunos llevamos la bondad clavada
como espina dorsal nos atraviesa.
Adn que genera una sustancia sagrada,
a fuego en las venas queda impresa.
Nos puedes ver apenas reflejados
pasando por la hierba sin pisarla
el aire casi lo pedimos prestado
y la vida conformados con amarla
en la distancia, suspirando, tentados.
Querríamos ser pérfidos y zafios,
crueles charlatanes desmedrados
lanzar nuestras cadenas y los garfios
a la cara de los guapos y mirados.
Quisiéramos cagarnos bien en todo
romper la vida misma en mil pedazos
para echar luego las culpas al modo
en que esta mundo, y dar de latigazos
a patanes estirados en el lodo.
Guardaté de los bien civilizados
que se matan cada día las entrañas
no sea que al demonio amaestrado
le de por conocer su autentica calaña.
y cargarse esta patraña de ganado.
Me ha encantado BUENO BUENO
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